sábado, 2 de julio de 2016

El acoso escolar. Algunas claves para entenderlo y evitarlo.

María Ruiz Gippini
Psiquiatra

Hola a todos! Espero que sigáis disfrutando del verano, sobre todo ahora que el tiempo acompaña! En este primer post quería aprovechar para revisar un poco el tema que esta muy de moda, el del acoso escolar. Este problema en los últimos años está despertando gran interés en nuestro país. Continuamente están saliendo noticias sobre este tema en la televisión y está a punto de estrenarse un programa llamado: Proyecto bullying.

Desde el inicio de nuestra historia, siempre ha existido una lucha de poder entre los seres humanos. Parece evidente, que hoy en día las relaciones humanas siguen estando marcadas por el poder. Prueba de ello, es que al entrar en un aula ya desde edades muy tempranas los profesores pueden detectar quienes son “los líderes” de la clase y a los alumnos “más vulnerables”.

Durante la adolescencia esto último se hace especialmente manifiesto, y se establecen marcadas relaciones de dominio-sumisión en el aula. No debemos olvidar que la adolescencia es una etapa de gran cambio en la vida de las personas (físicos, psíquicos,etc) que nos prepara para la edad adulta. En este período cobran especial importancia en la vida del adolescente los amigos y estos tienen una gran influencia en su conducta.

Es fundamental que lo profesionales de la salud, docentes y los padres sepamos distinguir las relaciones de dominio-sumisión que se dan de manera natural entre los alumnos del fenómeno de acoso escolar, conocido de forma universal como bullying.
Debemos saber que no todas las situaciones de violencia en el medio escolar son casos de abuso, de hecho lo más frecuente es que se trate de un conflicto entre iguales (como una discusión o pelea en el patio del recreo entre dos niños en la que ninguno está indefenso con respecto al otro).

¿Cuando podemos saber que estamos ante un caso de acoso escolar? En el Protocolo de actuación ante conflictos:procedimientos de intervención sobre acoso y maltrato escolar. Torrego J.C y Fernández I (2010) se resumen los aspectos que caracterizan el acoso escolar:

1. Se causa daño a un individuo que está en una situación de indefensión, sumisión o inferioridad. Existe una relación de asimetría de poder entre el agresor y la víctima
Estas agresiones pueden ser:
Agresiones físicas: directas (peleas, golpes, palizas, empujones...) o indirectas (pequeños hurtos, destrozo de pertenencias, provocaciones...).
Agresiones verbales: directas (insultos a la víctima y/o su familia, ofensas hacia la persona o su familia) o indirectas (hablar mal de alguien, sembrar rumores y mentiras).
Agresión psicológica por medio de intimidaciones, chantaje y amenazas para provocar miedo, obtener algún objeto o dinero, u obligar a la víctima a hacer cosas que no quiere hacer.
Aislamiento y exclusión social: no dejar participar a la víctima, aislarle del propio grupo ignorando su presencia, o no contando con él o ella para actividades del grupo.
Acoso racial, xenofobia o homofobia o por presencia de discapacidad: dirigido a colectivos de personas diferentes y que por tanto no responden a la norma homogénea (inmigrantes o minorías étnicas, alumnos diferentes...); usar motes racistas o frases estereotipadas despectivas.
Acoso sexual: Supone un atentado dirigido a la dignidad y libertad sexual de las personas. Alusiones o agresiones verbales obscenas, toques o agresiones físicas.
Intimidación por medios tecnológicos: intimidaciones a través de e-mail, chats, mensajes en teléfono móvil, etc.

2. El daño se ejerce de forma repetida en el tiempo, durante un período largo y de forma recurrente. No se trata por lo tanto de un abuso puntual, sino que se da a lo largo de un tiempo prolongado, por ejemplo durante todo un curso escolar.

3. El agresor o agresores muestran intencionalidad de hacer daño aunque a menudo lo justifican con "es una broma" o todos lo hacemos.

Un aspecto importante que hay que tener en cuenta cuando hablamos del acoso escolar o bullying, es que puede no se trata un estrés psicológico banal en la vida del alumno, sino que el grado de malestar que genera repercute en el resto de áreas de su salud. Por ello los adultos debemos estar atentos ante cambios en el comportamiento de los niños que pueden ser muy variables, pero entre los que es frecuente que se den: disminución del rendimiento académico, irritabilidad o agresividad en casa (como forma de expresar su malestar en la escuela), llanto fácil (que se pongan a llorar sin razones aparentes), descuido de su aseo, etc.

El terapeuta López-Assor propone una serie de consejos para prevenir el acoso escolar en las primeras etapas:
Identificar los perfiles psicológicos que hay en el aula. Para ello López-Assor recomienda a los maestros que observen y estudien los perfiles psicológicos de sus alumnos a la hora de hacer grupos.
Enseñar a los niños más pequeños a diferenciar lo que está bien de lo que está mal, y a canalizar su ira.
Fomentar la comunicación.El enemigo número uno de la víctima de acoso es el silencio”. El niño debe aprender a expresar sus emociones y a comunicárselas a un adulto o persona de su confianza.
Ser conscientes de la gravedad tanto de los ataques intimidatorios como de los psicológicos. Con frecuencia podemos ver como los alumnos se dirigen entre sí con motes, emplean expresiones peyorativas...que pueden convertirse en una situación de maltrato psicológico si no se paran a tiempo.
La identificación de los lugares “ciegos” en las instalaciones de la instalación escolar. Siempre existen lugares donde un niño puede aprovechar para agredir o intimidar a otro al que tenga "manía". Por ejemplo en los baños del colegio, a la salida, en un pasillo, etc.

Espero que esta revisión os haya aclarado un poco más sobre el tema.

Un saludo y feliz verano!

Referencias bibliográficas:
Stassen BK. Update on bullying at school:Science forgotten? Developmental Reviuw 2007; 27:90-126).
Torrego J.C, Fernández. Protocolos de actuación urgente ante conflictos.2010:pág1.
Olweus (1998) en Banchard Giménez y Muzás Rubio, 2007:16).