Que no le tomen el pelo. Sepa cómo elegir a un nutricionista adecuado. Su salud no es algo con lo que jugar.
Raquel Martínez Garnelo, diplomada en Dietética y Nutrición.
Raquel Martínez Garnelo, diplomada en Dietética y Nutrición.
Me
veo en la obligación, dado el intrusismo y el caos existente, de
definir la figura del Dietista-Nutricionista. Un Dietista-Nutricionista
es un profesional diplomado como es un fisioterapeuta, enfermera,
terapeuta ocupacional, trabajador social, podólogo, etc… (Aunque he de
recordar que pronto con el plan Bolonia serán licenciados-graduados).
La
profesión de Dietista-Nutricionista está regulada a través del R.D.
433/1998, de 20 de marzo; la ley 44/2003 de ordenaciones de las
profesiones sanitarias, de 21 de noviembre; la orden CIN/730/2009, de 18
de marzo. Enumero estas normas por si el lector desea dirigirse a ellas
para profundizar en el tema.
El
Dietista-Nutricionista es un profesional de la salud con titulación
universitaria, reconocido como un experto en alimentación, nutrición y
dietética, con capacidad para intervenir en
la alimentación de una persona o grupo desde los siguientes ámbitos de
actuación: la nutrición en la salud y enfermedad, el consejo dietético,
la investigación, la docencia, la salud pública desde organismos
gubernamentales, las empresas del sector de la alimentación, la
restauración colectiva y social. Esta información, que para algunos
puede resultar algo pesada, en mi opinión es fundamental y me gustaría
que el lector la valorase y la tuviese muy en cuenta.
Ahora, me gustaría sumergirme o mejor dicho sumergirles en una verdad más que obviada, está
en nuestras manos la oportunidad de seleccionar el profesional que nos
trate, tener la tranquilidad de que está cualificado y poner nuestra
salud en buenas manos.
Los
medios de comunicación, la publicidad, nos bombardean con informaciones
erróneas o con fines ocultos y nos dejamos llevar por el
desconocimiento mientras organismos como la OCU (Organización de
Consumidores y Usuarios) o FACUA (Federación de Consumidores en Acción)
luchan contra esta vorágine a través de estudios y comunicados para la
defensa del consumidor, sin ir más lejos redacto de manera textual lo
que la OCU nos advierte sobre las pautas que debe seguir un buen profesional en una consulta dietética:
“identificarse, averiguar cuál
es la situación de partida del paciente, enseñar a comer, y adquirir
unos hábitos saludables, proponer un ritmo de adelgazamiento, no tener
intereses comerciales (no vender productos en su consulta), hacer un
seguimiento y valorar cuando el tratamiento es exitoso”
Y nos recuerda que:
"la
fórmula mágica para adelgazar está compuesta por 4 ingredientes: Tesón,
Alimentación adecuada, Modificación de los hábitos de vida y
Seguimiento por un especialista". (EcoDiario - 27/05/08).
En sus denuncias, FACUA argumenta que:
La publicidad de una famosa cadena especializada en la venta
de sus productos , acompañados de una serie de pautas alimentarias con
la finalidad de adelgazar, vulnera el Real Decreto 1.907/1996, de 2 de
agosto, sobre publicidad y promoción comercial de productos, actividades
o servicios con pretendida finalidad sanitaria.
La citada norma prohíbe en su artículo 4.7 "aportar testimonios" en su publicidad, pero esta cadena presenta, tanto en su página Web como en sus folletos, declaraciones e imágenes de supuestos usuarios que aseguran haber perdido hasta 64 kilogramos con su método.” (Terra noticias - 01/10/08)
La citada norma prohíbe en su artículo 4.7 "aportar testimonios" en su publicidad, pero esta cadena presenta, tanto en su página Web como en sus folletos, declaraciones e imágenes de supuestos usuarios que aseguran haber perdido hasta 64 kilogramos con su método.” (Terra noticias - 01/10/08)
Consumur (Asociación Murciana de Consumidores y Usuarios), ha denunciado ante las autoridades sanitarias:
“la existencia de cinco páginas Web
dedicadas a la comercialización de supuestos fármacos adelgazantes. La
publicidad de estos productos utiliza reclamos fraudulentos como "el limpiador de colon quemagrasas más potente" o "¡Lo conseguí!, 18 Kilos en dos meses y medio", supuesto testimonio de un consumidor del producto.” (Facua.org - 24/09/09)
Por tanto, voy a limitarme a enumerar una serie de puntos fundamentales a la hora de escoger un centro:
1- Exigir que la titulación del profesional sea adecuada.
En muchos casos nos atiende personal no cualificado como farmacéuticos,
biólogos, ATS, esteticien, psicólogos… que simplemente han hecho un
cursillo y se creen con la capacidad de desempeñar dicho trabajo,
actuando como un Dietita-Nutricionista o un médico.
2- Borrar
de nuestra lista aquellos centros que nos propongan una reducción de
peso superior a 4 kilos al mes durante todo el tratamiento.
3- Evitar aquellos centros que basen su actuación en productos estrella que en ocasiones denominan “adelgazantes” cuya denominación por ley no está permitida (la
legislación prohíbe la publicación de productos “que sugieren
propiedades específicas adelgazantes o contra la obesidad” artículo 4.2
R.D. 1907/1996 pero las empresas que comercializan estos productos se
las ingenian para burlarla) y que en el mejor de los casos no nos afectan en nada, exclusivamente a nuestro bolsillo.
Con referencia a esto último, les indico que tienen el derecho a ser informados no sólo del tratamiento dietético que van a recibir sino de los coadyuvantes que les prescriban como complementos a la dieta.
Y, por favor, soliciten firmados y por escrito los tratamientos complementarios (eliminadores de líquido, quemadores de grasa etc…) con el fin de tener pruebas documentadas si les acaece alguna negligencia por su causa.
Con referencia a esto último, les indico que tienen el derecho a ser informados no sólo del tratamiento dietético que van a recibir sino de los coadyuvantes que les prescriban como complementos a la dieta.
Y, por favor, soliciten firmados y por escrito los tratamientos complementarios (eliminadores de líquido, quemadores de grasa etc…) con el fin de tener pruebas documentadas si les acaece alguna negligencia por su causa.
4- Por último, referirnos a aquellos que utilizan como anzuelo la primera consulta gratuita o
que nos venden la dieta de forma gratuita pero obligan a comprar sus
productos. Debo informar al lector que, en un elevado porcentaje de los
casos, la eficacia es nula a largo plazo y el gasto es mayor. Por favor les invito a que comparen, pierdan unos minutos y comparen.
Finalmente me despido instándoles a que pregunten.
Pregunten, infórmense…es su salud la que está en juego.
Raquel Martínez Garnelo
Diplomada en Nutrición Humana y Dietética
Miembro de la AED-N nº asociado 2208
Dietista–Nutricionista Hospital Policlínico La Rosaleda
Dietista-Nutricionista Centro Médico Pontevedra
